Septiembre es un mes que ha dejado una marca imborrable en la memoria de los mexicanos debido a los devastadores terremotos que han ocurrido en distintas fechas de este mes a lo largo de la historia. Desde el fatídico 19 de septiembre de 1985, cuando un terremoto de magnitud 8.1 sacudió la Ciudad de México, hasta los sismos recientes de 2017, el miedo a que “la tierra vuelva a temblar” en septiembre es un tema recurrente entre la población. Con la llegada de septiembre 2024, surge una pregunta inevitable: ¿hay una mayor probabilidad de que ocurra un nuevo terremoto en este mes?
La Historia de los Terremotos en Septiembre
Los terremotos del 19 de septiembre de 1985 y de 2017, ambos en la Ciudad de México, han generado una percepción de que septiembre es un mes particularmente peligroso en términos sísmicos. Aunque la coincidencia de estas fechas es notable, los sismólogos han enfatizado que no existe una relación científica que respalde la idea de que septiembre sea más propenso a sismos que cualquier otro mes del año.
El sismo de 1985, con una magnitud de 8.1, fue uno de los más destructivos en la historia de México, dejando miles de muertos y provocando cambios significativos en la normatividad de construcción en el país. En 2017, dos terremotos significativos ocurrieron el 7 y el 19 de septiembre, el segundo coincidiendo con el aniversario del terremoto de 1985. Estas coincidencias han alimentado el temor y la creencia popular de que septiembre es un mes “maldito” para los sismos en México.
¿Es Septiembre un Mes con Mayor Probabilidad de Terremotos?
Es importante entender que los terremotos son fenómenos naturales impredecibles. A pesar de las coincidencias en las fechas, los sismos no tienen un calendario específico y no hay evidencia científica que sugiera que septiembre es más propenso a temblores. Los movimientos telúricos en México son el resultado de la interacción de varias placas tectónicas, particularmente la Placa de Cocos que se subduce debajo de la Placa Norteamericana.
Los expertos del Servicio Sismológico Nacional (SSN) han reiterado que los terremotos pueden ocurrir en cualquier momento y que la idea de que septiembre es un mes sísmicamente activo es una percepción errónea influenciada por la memoria colectiva de los eventos pasados.
La Situación en Septiembre 2024
En cuanto a la posibilidad de que ocurra un terremoto en septiembre de 2024, la realidad es que no existe una manera de predecir con precisión cuándo y dónde ocurrirá el próximo gran sismo en México. Los sismólogos utilizan modelos probabilísticos basados en el historial de actividad sísmica y el comportamiento de las placas tectónicas para evaluar el riesgo sísmico a largo plazo, pero estos modelos no permiten predicciones específicas de tiempo y lugar.
La mejor manera de prepararse para un posible terremoto es mantener una cultura de prevención y estar siempre listos para actuar en caso de emergencia. Las autoridades recomiendan tener un plan familiar de protección civil, revisar y asegurar las estructuras de las viviendas, y participar en simulacros, como el que se realiza cada 19 de septiembre en conmemoración de los sismos de 1985 y 2017.
Aunque septiembre es un mes cargado de significado y temor para muchos mexicanos, no hay evidencia científica que sugiera que los terremotos son más probables en este mes que en cualquier otro. La percepción de que septiembre es un mes peligroso se debe más a coincidencias trágicas que a una realidad geológica. Sin embargo, estar preparado y consciente de los riesgos sísmicos es fundamental en un país como México, donde los terremotos forman parte de la vida cotidiana.
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